Con la abundancia de información sanitaria disponible actualmente, puede resultar difícil discernir qué es verdadero y qué no lo es. Todos necesitamos acceso a fuentes de información confiables para permanecer seguros y sanos.
Por qué importa la desinformación sobre la salud
Todos podemos beneficiarnos si tomamos medidas para mejorar la calidad de la información sanitaria que consumimos. Limitar la información errónea nos ayuda a tomar decisiones más informadas para nosotros, nuestros seres queridos y nuestras comunidades.
“La desinformación sobre la salud es una amenaza grave para la salud pública. Puede causar confusión, propagar la desconfianza, dañar la salud de las personas y socavar el trabajo de la salud pública.”
—Dr. Vivek H. Murthy
Cirujano General de los Estados Unidos
Conclusiones principales de las Recomendaciones
Las Recomendaciones del Cirujano General se basan en los datos científicos más fehacientes que se encuentren disponibles para explicar los principales desafíos de la salud pública y sugerir soluciones posibles.
Compartir
- Compartir Conclusiones principales en Facebook
- Compartir Conclusiones principales en Twitter
- Compartir Conclusiones principales en LinkedIn
- Compartir Conclusiones principales por correo electrónico
Definir la información errónea
La información errónea es información falsa, imprecisa o engañosa según la evidencia más fehaciente disponible al momento.
Efectos relacionados con el COVID-19
Durante la pandemia, la desinformación sobre la salud llevó a las personas a denegar vacunas, rechazar medidas de salud pública y utilizar tratamientos sin comprobar. La desinformación sobre la salud también dio lugar a hostigamiento y violencia contra trabajadores sanitarios, personal de líneas aéreas y otros trabajadores esenciales que tenían la tarea de comunicar medidas de salud pública cambiantes.
Cómo se difunde la desinformación sobre la salud
La creciente cantidad de lugares en los que las personas buscan información ha facilitado la difusión de información errónea a una velocidad y una escala sin precedentes. La información errónea se difunde con facilidad especialmente en las redes sociales y en las tiendas virtuales, al igual que en los motores de búsqueda.
Abordar la desinformación sobre la salud
Juntos, tenemos el poder de construir un ambiente informativo más sano. De la misma forma en que todos nos hemos beneficiado con los esfuerzos para mejorar la calidad del agua y el aire, limitar la prevalencia y el impacto de la información errónea beneficia la salud pública e individual.
Preguntas y respuestas acerca de la información errónea con el Dr. Vivek Murthy
La información errónea es información falsa, imprecisa o engañosa según la evidencia más fehaciente disponible al momento.
La desinformación es información errónea utilizada con un propósito malicioso, como engañar a las personas para que crean algo con el fin de ganar dinero u obtener ventaja política.
La información falsa o engañosa está llevando a las personas a tomar decisiones que podrían tener consecuencias peligrosas para su salud. La información errónea acerca de dolencias, enfermedades, tratamientos y curas posibles, vacunas, dietas y procedimientos cosméticos es especialmente dañina. Por ejemplo, durante la pandemia del COVID-19, la información errónea llevó a las personas a denegar vacunas para el COVID-19, rechazar medidas de salud pública como el uso de mascarillas y la distancia física, y utilizar tratamientos sin comprobar.
Considere los siguientes pasos para determinar si la información es precisa:
- Consulte CDC.gov u otros sitios web de departamentos de salud pública para ver si hay información acerca de la afirmación.
- Pregunte a una fuente creíble, como un médico o enfermero, si tiene información adicional.
- Escriba la afirmación en un motor de búsqueda para ver si una fuente creíble la ha verificado.
- Lea la página "Quiénes somos" del sitio web para ver si puede confiar en la fuente.
- Finalmente, si no confía en el contenido, no lo comparta.
Para obtener más información acerca de tipos comunes de fuentes de desinformación sobre la salud, consulte nuestras Herramientas comunitarias para abordar la desinformación sobre la salud.
Como individuos, podemos ayudar a detener la difusión de información errónea dando los pasos siguientes:
- Aprender a identificar y evitar compartir desinformación sobre la salud. Verificar la precisión de la información consultando fuentes confiables y creíbles. No compartir la información si no está seguro.
- Conversar con sus amigos y su familia acerca del problema de la desinformación sobre la salud. Escuchar con empatía, hacer preguntas, brindar explicaciones alternativas y no esperar el éxito con una sola conversación.
- Abordar la desinformación sobre la salud en su comunidad trabajando con escuelas, grupos comunitarios y profesionales sanitarios para desarrollar estrategias locales contra la información errónea.
- Escuchar: La mejor forma de cambiar la opinión de alguien acerca de la información errónea es escuchar primero sus miedos e intentar comprender por qué creen lo que creen.
- Empatizar: Cuando hable con un amigo o miembros de su familia, exprese que comprende por qué a las personas les cuesta creer en ciertas fuentes de información.
- No humillar públicamente a nadie: En lo posible, intente tener conversaciones a solas.
- Utilizar lenguaje inclusivo: Cuando pueda, use frases y términos como "comprendo", "yo también estuve confundido", "nuestra comunidad" y "nosotros" para que la persona sienta que usted se identifica con ella.
end of accordion
¿Cómo podemos actuar?
Todos tenemos el poder de detener la difusión de información errónea. Con los siguientes pasos, podemos protegernos y proteger a nuestros seres queridos de la información errónea nociva.
Formas de actuar según su rol
Qué pueden hacer los individuos:
- Aprender a identificar y evitar compartir desinformación sobre la salud.
- Conversar con los amigos y la familia acerca del problema de la desinformación sobre la salud.
- Abordar la desinformación sobre la salud en su comunidad.
Qué pueden hacer los educadores:
- Fortalecer e incrementar el uso de programas educativos basados en evidencia que promuevan la resiliencia ante la información errónea.
- Informar a los estudiantes y al público acerca de tácticas comunes que emplean los que difunden información errónea por Internet.
- Establecer mediciones de calidad para evaluar el progreso en los conocimientos acerca de la información.
Qué pueden hacer los profesionales sanitarios:
- Conversar proactivamente con los pacientes y el público acerca de la desinformación sobre la salud
- Usar la tecnología y las plataformas mediáticas para compartir información sanitaria precisa con el público
- Asociarse con grupos comunitarios y otras organizaciones locales para prevenir y abordar la desinformación sobre la salud.
Qué pueden hacer los medios y los periodistas:
- Capacitar a periodistas, editores y otros profesionales mediáticos para que reconozcan, corrijan y eviten amplificar la información errónea.
- Contestar proactivamente las preguntas del público.
- Brindar contexto al público para evitar sesgar su percepción de los debates del momento sobre temas sanitarios.
- Revisar minuciosamente la información en preimpresiones.
- Utilizar una gama más amplia de fuentes confiables, particularmente fuentes locales.
- Considerar titulares e imágenes que informen en vez de impresionar o provocar.
Qué pueden hacer las plataformas tecnológicas:
- Dar acceso a datos útiles a los investigadores para que puedan analizar adecuadamente la difusión y el impacto de la información errónea.
- Fortalecer el control de la información errónea.
- Priorizar la detección temprana de "súper difusores" de información errónea y reincidentes.
- Evaluar la eficacia de prácticas y políticas internas para abordar la información errónea y ser transparente con los hallazgos.
- Abordar proactivamente los déficits de información.
- Amplificar las comunicaciones de mensajeron confiables y expertos en el tema.
- Priorizar la protección de los profesionales sanitarios y los periodistas del hostigamiento en Internet.
Qué pueden hacer los investigadores:
- Fortalecer el control de las preguntas, inquietudes e información errónea acerca de la salud.
- Evaluar el impacto de la desinformación sobre la salud.
- Priorizar la comprensión de la forma en que las personas están expuestas a información errónea y afectadas por ella, y cómo puede variar eso en distintas subpoblaciones.
- Evaluar la eficacia de estrategias y políticas para prevenir y abordar la desinformación sobre la salud.
Qué pueden hacer los financistas:
- Moverse con urgencia hacia una inversión coordinada y a escala para combatir la información errónea.
- Invertir en cuantificar los daños de la información errónea e identificar las intervenciones basadas en evidencia.
- Brindar capacitación y recursos a los donatarios que trabajen en comunidades desproporcionadamente afectadas por la información errónea (por ej., áreas con poca confianza en las vacunas).
- Incentivar la coordinación entre los donatarios para maximar el alcance, evitar la duplicación y reunir habilidades diversas.
Qué pueden hacer los gobiernos:
- Convocar a socios federales, estatales, locales, territoriales, tribales, privados, sin fines de lucro e investigadores para que exploren el impacto de la desinformación sobre la salud y establezcan las mejores prácticas para su prevención.
- Incrementar la inversión en investigación acerca de la información errónea.
- Seguir modernizando las comunicaciones de salud pública.
- Incrementar los recursos y la asistencia técnica a organismos de salud pública estatales y locales para ayudarlos a abordar mejor las preguntas, inquietudes e información errónea.
- Expandir los esfuerzos para construir resiliencia a largo plazo ante la información errónea, como programas educativos.
Haga correr la voz con estas herramientas para compartir
Las Herramientas comunitarias para abordar la desinformación sobre la salud del Director General de Salud Pública brindan recursos e indicaciones específicas para proveedores sanitarios, educadores, bibliotecarios, líderes religiosos y miembros confiables de la comunidad para comprender, identificar y detener la difusión de desinformación sobre la salud en sus comunidades.
Se desarrolló en colaboración con la Oficina de Ciencias de la Evaluación (OES)
Video acerca de las razones para utilizar las Herramientas comunitarias
Este anticipo presenta las Herramientas comunitarias que pueden utilizarse para educar y capacitar.
Descargar - MP4 [61.3 MB]
Herramientas comunitarias
Un resumen de 22 páginas acerca de la desinformación sobre la salud y los recursos para detenerla.
Descargar en Inglés [2.6 MB]
Descargar en Español [4.3 MB]
Diapositivas educativas
Una versión de las Herramientas comunitarias como presentación de diapositivas para educadores y otros líderes comunitarios.
Descargar [22.4 MB]
Hable con su comunidad acerca de la desinformación sobre la salud
Una infografía con consejos para hablar con su comunidad acerca de la desinformación sobre la salud.
Descargar en Inglés [322 KB]
Descargar en Español [1.2 MB]
Lista de verificación para la desinformación sobre la salud
Utilice esta lista de verificación cada vez que se encuentre con contenido sanitario dudoso.
Descargar en Inglés [257 KB]
Descargar en Español [1 MB]
Resumen de una página (versión en diapositiva)
Esta diapositiva incluye las conslusiones principales del anuncio.
Descargar [185 KB]
Resumen de una página (versión imprimible)
Esta página incluye las conslusiones principales del anuncio.
Descargar [169 KB]
Recursos adicionales
Mitos y verdades acerca de las vacunas para el COVID-19
La información precisa acerca de las vacunas es crucial y puede ayudar a detener rumores y mitos comunes. Puede resultar difícil discernir en qué fuentes de información puede confiar. Aquí hay una guía de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades sobre los mitos y verdades acerca de la vacunación contra el COVID-19.
Compartir
- Compartir Mitos y verdades acerca de las vacunas para el COVID-19 en Facebook
- Compartir Mitos y verdades acerca de las vacunas para el COVID-19 en Twitter
- Compartir Mitos y verdades acerca de las vacunas para el COVID-19 en LinkedIn
- Compartir Mitos y verdades acerca de las vacunas para el COVID-19 por correo electrónico
Combatir la información errónea con mensajes sanitarios
Escrito por Dana Litt y Scott Walters el 24 de marzo de 2021
Este artículo brinda orientación acerca de las mejores prácticas para detectar la desinformación sobre la salud y evaluar la precisión de distintas fuentes de información.
Compartir
- Compartir Combatir la información errónea con mensajes sanitarios en Facebook
- Compartir Combatir la información errónea con mensajes sanitarios en Twitter
- Compartir Combatir la información errónea con mensajes sanitarios en LinkedIn
- Compartir Combatir la información errónea con mensajes sanitarios por correo electrónico
Video acerca de la desinformación sobre la salud
Este anticipo presenta el anuncio del Director General de Salud Pública de los Estados Unidos, "Confrontar la desinformación sobre la salud", y su importancia. Este video puede utilizarse para educar y capacitar.
Descargar - MP4 [80.4 MB]
Compartir